Más del Performance en Venezuela. Carlos Zerpa
Más del Performance en Venezuela
Carlos Zerpa
Todo va tan acelerado y la cuerda es tan larga que pareciera, que la gente en Venezuela no termina de fijar en su memoria los hechos acontecidos.
A finales de los años setenta y comienzo de los ochenta, es en donde se forma un movimiento tan fuerte que sacudiría el panorama de las artes plásticas tradicionales en Venezuela y me atrevería a decir que también en toda Latinoamérica… un grupo de artistas Venezolanos participamos en una experiencia artística ligada a las Acciones en Vivo y al Performance Art, no era otra cosa que mostrarnos a nosotros mismos como retratos de nuestras vivencias, como esculturas vivas, como autorretratos de una pintura en movimiento, una verdadera pintura de acción, realizando eventos, mostrándonos en acciones efímeras en donde NO había teatro; eran celebraciones, sangre, lagrimas, sudor… cantos a la vida o a la muerte, retenidos solo en la memoria de quienes los presenciaron, o quizás en unas fotografías, un video o una película en súper 8 o 16 mm, fue la época de oro del arte de vanguardia, de los festivales de cine súper 8 (con Julio Neri, Diego Rísquez y Carlos Castillo), que luego devendrían en los de video arte, de las invitaciones a los Venezolanos a participar en los festivales internacionales de “Avant Garde” organizados por Charlotte Moorman en Nueva York (junto a figuras importantes como Nan June Paik, Yoko Ono, John Lennon, John Cage, Christo, John Halpern, Joseph Buys, AY-O, Brian Buczak, Carolee Schneemann y un largo etcétera…) de la época prodigiosa del Mail Art, de las video instalaciones y de los video Performances (con Margarita D´Amico), de las acciones de “Arte Bípedo” en la Galería de Arte Nacional, organizadas por Marco Antonio Ettedgui, quien también hizo la curaduría de las “Acciones Frente a la Plaza”, (Performancistas tomando con acciones, la gobernación de Caracas frente a la plaza Bolívar), la invitación a los Performancistas y conceptualistas Venezolanos al Coloquio de Arte No-Objetual en el Museo de Arte Moderno de Medellín organizado por Juan Acha (Cabe destacar aquí la relación estrecha que tengo desde ese entonces, con historiadores, grupos y artistas del Performance… Mexicanos: Peyote y la Compañía, el No Grupo y Proceso Pentágono, así como también con Felipe Ehrenberg, Víctor Muñoz, Maris Bustamante, Rita Eder, Melquíades Herrera, Adolfo Patiño, Rubén Valencia, Magali Lara, Lourdes Grobet… con los Argentinos: Jorge Glusberg, Leopoldo Maler, Marta Minujin, Víctor Grippo, Liliana Porter, Graciela Gutiérrez Marx… con la Cubana: Ana Mendieta… con los Colombianos: Antonio Caro, Alberto Sierra, Álvaro Herazo, Iginio Caro, Miguel González, Nadin Ospina, Alvaro Barrios, Jonier Marín, Leonel Estrada… con el Peruano: Mirco Lauer… con el Uruguayo: Clemente Padín… y con los Brasileños Cildo Meireles, Aracy Amaral, Paulo Brusky y Regina Vater) La invitación que nos hizo Jorge Glusberg a participar con Performances en el CAYC, Centro de Arte e Información de Buenos Aires, Argentina, la invitación que nos hizo John Stringer a participar con Performances en el Center for Inter American Relation en Nueva York, la participación Venezolana en la Bienal de Medellín, la Bienal de Sao Paulo y El Foro de Arte Contemporáneo dirigido por Tomás Parra en México… lógicamente la interrelación que se dio luego de todos estos eventos, del grupo de Performancistas Venezolanos con otros artistas, museos e instituciones de México, Perú, Argentina, Colombia, Chile, Uruguay, Brasil, España, Italia, Francia, Inglaterra y Los Estados Unidos de Norte América.
Carlos Zerpa
Todo va tan acelerado y la cuerda es tan larga que pareciera, que la gente en Venezuela no termina de fijar en su memoria los hechos acontecidos.
A finales de los años setenta y comienzo de los ochenta, es en donde se forma un movimiento tan fuerte que sacudiría el panorama de las artes plásticas tradicionales en Venezuela y me atrevería a decir que también en toda Latinoamérica… un grupo de artistas Venezolanos participamos en una experiencia artística ligada a las Acciones en Vivo y al Performance Art, no era otra cosa que mostrarnos a nosotros mismos como retratos de nuestras vivencias, como esculturas vivas, como autorretratos de una pintura en movimiento, una verdadera pintura de acción, realizando eventos, mostrándonos en acciones efímeras en donde NO había teatro; eran celebraciones, sangre, lagrimas, sudor… cantos a la vida o a la muerte, retenidos solo en la memoria de quienes los presenciaron, o quizás en unas fotografías, un video o una película en súper 8 o 16 mm, fue la época de oro del arte de vanguardia, de los festivales de cine súper 8 (con Julio Neri, Diego Rísquez y Carlos Castillo), que luego devendrían en los de video arte, de las invitaciones a los Venezolanos a participar en los festivales internacionales de “Avant Garde” organizados por Charlotte Moorman en Nueva York (junto a figuras importantes como Nan June Paik, Yoko Ono, John Lennon, John Cage, Christo, John Halpern, Joseph Buys, AY-O, Brian Buczak, Carolee Schneemann y un largo etcétera…) de la época prodigiosa del Mail Art, de las video instalaciones y de los video Performances (con Margarita D´Amico), de las acciones de “Arte Bípedo” en la Galería de Arte Nacional, organizadas por Marco Antonio Ettedgui, quien también hizo la curaduría de las “Acciones Frente a la Plaza”, (Performancistas tomando con acciones, la gobernación de Caracas frente a la plaza Bolívar), la invitación a los Performancistas y conceptualistas Venezolanos al Coloquio de Arte No-Objetual en el Museo de Arte Moderno de Medellín organizado por Juan Acha (Cabe destacar aquí la relación estrecha que tengo desde ese entonces, con historiadores, grupos y artistas del Performance… Mexicanos: Peyote y la Compañía, el No Grupo y Proceso Pentágono, así como también con Felipe Ehrenberg, Víctor Muñoz, Maris Bustamante, Rita Eder, Melquíades Herrera, Adolfo Patiño, Rubén Valencia, Magali Lara, Lourdes Grobet… con los Argentinos: Jorge Glusberg, Leopoldo Maler, Marta Minujin, Víctor Grippo, Liliana Porter, Graciela Gutiérrez Marx… con la Cubana: Ana Mendieta… con los Colombianos: Antonio Caro, Alberto Sierra, Álvaro Herazo, Iginio Caro, Miguel González, Nadin Ospina, Alvaro Barrios, Jonier Marín, Leonel Estrada… con el Peruano: Mirco Lauer… con el Uruguayo: Clemente Padín… y con los Brasileños Cildo Meireles, Aracy Amaral, Paulo Brusky y Regina Vater) La invitación que nos hizo Jorge Glusberg a participar con Performances en el CAYC, Centro de Arte e Información de Buenos Aires, Argentina, la invitación que nos hizo John Stringer a participar con Performances en el Center for Inter American Relation en Nueva York, la participación Venezolana en la Bienal de Medellín, la Bienal de Sao Paulo y El Foro de Arte Contemporáneo dirigido por Tomás Parra en México… lógicamente la interrelación que se dio luego de todos estos eventos, del grupo de Performancistas Venezolanos con otros artistas, museos e instituciones de México, Perú, Argentina, Colombia, Chile, Uruguay, Brasil, España, Italia, Francia, Inglaterra y Los Estados Unidos de Norte América.
